1. -Haz meditación.
La meditación en todas sus formas
ha sido y sigue siendo la manera más eficaz de defendernos de los ataques
psíquicos del entorno y de limpiarnos de los condicionamientos que ya hemos
adquirido como consecuencia de estos ataques; promueve la auto-consciencia,
desarrolla el dominio de la mente, nos pone en contacto con nuestro
inconsciente y desarrolla nuestra visión objetiva de la realidad.
Cualquier forma de meditación es
buena, sin embargo yo recomiendo que se practiquen asiduamente tres tipos
específicos de meditación:
-La meditación del vacío, que
consiste en vaciar la mente de su contenido y acceder al silencio.
-Meditación de los chakras, de
las cuales hay muchas versiones pero el punto central es lograr despertar y
armonizar los siete.
-Meditación con visualización y
energía, con esta meditación podemos desarrollar canales energéticos, organizar
la mente, desarrollar la capacidad de videncia con el tercer ojo y usar la luz
y sus siete frecuencias para disolver bloqueos mentales.
2.- Procura el orden.
Tanto en tu habitación, en tu
trabajo, en tu manera de vestir, en tus objetos personales y tus documentos,
como en tus ideas, sentimientos, impulsos, e inclusive en tus relaciones con
los demás y tus elecciones, procura siempre llevar un orden y una limpieza. El
desorden es un abandono, y el abandono es una actitud, ¿Cómo podrías pretender
confrontar un sistema que intenta controlarte si no estás dispuesto a tomar tú
el mando de tu vida?
Alguien que busca tener el
control de su vida debería empezar, literalmente por tener el control de su vida.
3.- Mantén un cuerpo y mente entrenados.
Un cuerpo que no es bien
alimentado, ejercitado y entrenado continuamente tenderá a crearse muchas
vulnerabilidades y deficiencias, necesidades reales y falsas, ansiedad, nerviosismo
y un sentimiento general de apatía; será una presa fácil de todo tipo de
tentaciones de la mercadotecnia para resolver los problemas que originalmente
se pudieron prevenir, soluciones que buscará en la industria farmacéutica,
cosmética, médica, de la moda, vicios, drogas, píldoras, etc.
Una mente que no es educada
residirá en la ignorancia y fácilmente caerá en engaños y seducciones del
mercado y los gobiernos; asimismo una mente sin cultura ni conocimientos
generales de filosofía, ciencia, religión, misticismo, arte, y en general de
los diferentes ámbitos humanos, es una mente flácida y enclenque, propensa a la
intimidación, manipulación, y a ser deslumbrada por falsos ídolos, profetas y
héroes.
El entrenamiento continuo de la
mente y el cuerpo en sus diversas ramas y potencialidades evita que surjan
grietas en nuestra persona por donde pueden entrar las artimañas psicológicas
del sistema.
4.- Sé más fuerte que la crítica.
En una sociedad enferma aquel que
procura la sanidad es un exiliado. Sabrás que estás en el camino correcto
mediante la señal más obvia: serás criticado, ridiculizado, ignorado,
desplazado, inclusive serás fuente de agresiones directas o indirectas que
intentarán disuadirte.
Esto es perfectamente normal, y
tendrás que enfrentarlo continuamente si has decidido tomar el camino de la
liberación; sin embargo tendrás que ser más fuerte que ello, y eso no significa
enfrascarte en peleas sin sentido contra criticando a aquellos que te critican,
más bien deberás ser indiferente ante sus reacciones, porque ellos realmente no
saben lo que están haciendo, recuerda que son víctimas psicológicas del
sistema. A pesar de todo deberás exponer tus ideas claramente, con seguridad,
confianza y decisión, sin intentar convencer o confrontar, sino solamente
mostrando tu forma de pensar de manera que la gente la tome o la deje por
elección propia; deberás olvidar el modificar, callar, tergiversar o suavizar
tus opiniones personales sólo para ser aceptado o dejar de ser criticado,
exclamarás tu verdad abiertamente y sin tapujos, y sobrellevarás pacíficamente,
como una roca, las consecuencias de ello.
5.- Abandona los hábitos consumistas.
El corazón de todo el poder del
sistema se basa en el consumismo. Hace no mucho tiempo en la India un gran
hombre entendió esto, se llamaba Ghandi y fue nombrado “Mahatma” (alma grande)
por su pueblo; el descubrió esta gran verdad y la usó nada más y nada menos que
para liberar pacíficamente a toda India de la opresión inglesa, sencillamente
ordenando un cese al consumo de los productos de procedencia inglesa.
Eventualmente esto provocó una gran crisis económica en lo que entonces era una
de las colonias de Inglaterra, una por una las empresas iban quebrando, hasta
que Inglaterra tuvo que resignarse a reconocer la independencia de la India.
Ghandi logró todo esto sencillamente liderando al pueblo en el no-consumismo.
En la actualidad todos somos
esclavos colonizados de las grandes empresas, nuestra esclavitud es
psicológica, es en nuestras mentes donde nos han conquistado y sometido, y todo
su poder se basa en la ganancia que obtienen cuando les compramos sus
productos, mismos que fabricamos trabajando con su capital.
Es muy sencillo, nosotros somos
esclavos trabajando por el mínimo pago para producir los productos que luego
nos venden, obteniendo así el valor de nuestras ganancias con las cuales
producen más capital y contratan más esclavos para producir aún más capital y
más esclavos de los cuales obtienen sus ganancias.
En el momento de comprar sus
productos, estás reafirmando el contrato social mediante el cual tú aceptas ser
esclavo, entonces…
¿Por qué seguimos comprando?
Porque:
- Se ha creado una estructura social mediante la cual sólo es posible encontrar aquello que necesitamos para sobrevivir procesado y vendido a nosotros por las empresas que se han hecho con la propiedad de todos los recursos naturales que pudieran existir.
- Nosotros hemos permitido, propiciado e incluso ayudado a construir este sistema, hemos edificado nuestras propias cárceles, debido a que desde la infancia hemos sido condicionados para obedecer esta estructura.
- Hemos hecho esto manipulados en una honda necesidad de superioridad que proviene de un profundo complejo de inferioridad creado a partir de la idea de que no existimos si no tenemos, de que mientras más y de mayor “calidad” sea lo que tenemos, mayores y mejores somos. Esta superioridad se valida y vuelve real y visible en el momento en que se manifiesta como clases sociales, es decir, en el escenario donde podemos ejecutar nuestro teatro de superioridad en un convenio social aceptado colectivamente, en donde la posesión de ciertos productos y la ejecución de ciertos ritos simbólicos de derroche nos califican ante los demás como superiores o inferiores. Estamos enfrascados en nuestra lucha de clases sociales haciendo el mayor esfuerzo posible por “escalar” y conseguir cada vez más productos inútiles y muy caros, y los que realmente ganan son los creadores y sustentadores de ese sistema, quienes tienen a sus esclavos de clase baja y alta, unos tratando de alcanzar a los otros y los otros tratando de nunca ser alcanzados o de perder sus estatus.
- Todo esto se logró mediante el uso masivo de sigilos como un acto silencioso de guerra en contra de la consciencia humana, enmascarado bajo el inofensivo nombre de mercadotecnia.
Mientras el sistema persista y
seamos dependientes de él para sobrevivir, podemos hacer esto:
-Deja de ver televisión. La
televisión es la mayor arma de destrucción masiva de la consciencia.
-Deja de consumir cosas inútiles.
Una cosa inútil es algo que no necesitas para satisfacer tus necesidades
vitales, como por ejemplo una televisión de pantalla de plasma, el último y más
moderno teléfono móvil, ropa y accesorios de diseño mercadotécnico, y cualquier
cosa que se use en el falso concurso de las clases sociales.
-Abandona el concurso de las
clases sociales. Demuestra tu compromiso con la lucha y enfrenta el aparente
repudio social.
6.- Participa y mantente informado de los movimientos insurgentes.
En la red hay una gran variedad
de movimientos que buscan el cambio social y la desintegración del sistema
capitalista-materialista, como Zeitgeist, Anonymus, The Way Seers etc. Trata de
mantenerte informado y activo de todos los que puedas y comparar y compartir
las soluciones, propuestas e ideologías presentadas por los representantes de
estos movimientos. Busca la continua difusión y si es posible el contacto entre
estos movimientos, háblalo con las personas que piensen como tú y con todos
aquellos que estén dispuestos a escuchar.
7.- Usa elementos de protección.
Hay una gran cantidad de
alteraciones negativas de la energía ambiental y psíquica en nuestro entorno,
debido a las construcciones tecnológicas y el bombardeo de estímulos por parte
del mercado, todo esto genera alteraciones y deficiencias en nuestros campos
energéticos. Para evitar esto debemos usar lo que esté dentro de nuestros
conocimientos esotéricos para defendernos, como amuletos consagrados, sigilos
de protección, materiales como cuarzos, obsidiana, plata, oro, usar el feng
shui, etc. Un Mago bien entrenado debería poder orientarte sobre eso, y si lo
eres tú mismo, haz lo que sabes considerando la gran cantidad de ataques
psíquicos en el campo egregórico unificado.
8.- Haz el RMP.
Aleister Crowley, uno de los más
grandes ocultistas de nuestra era, desarrolló el Ritual Menor del Pentagrama a
partir de sus conocimientos esotéricos obtenidos en escuelas de ocultismo y
misticismo de todas partes del mundo. El RMP es un ritual de destierro de
energías negativas, anómalas e intrusivas así como de protección y sello en
contra de las que puedan provenir posteriormente. Debería ser practicado todos
los días de ser posible. Un Mago hermetista sabe como hacerlo y podría
orientarte, de lo contrario podrás encontrar guías en cualquier parte de
internet. Si no estás familiarizado con este tipo de prácticas de Magia Ritual,
se puede diseñar una versión sintetizada y simple para principiantes, sólo
mantente en contacto con los organizadores del proyecto Serpiente de Cobre.
9.- Procura el Amor.
El amor es una actitud de unidad
y benevolencia que debe ser procurada en nuestras acciones y relaciones
diarias, debemos tener en cuenta el amor en nuestra relación con la naturaleza,
con la sociedad, con nuestros iguales y con nuestros desiguales, y por sobre
todo, con nosotros mismos y la divinidad. El amor es una actitud de respeto,
solidaridad, unidad, servicio, compasión, empatía y justicia en nuestros actos.
Si nos conservamos actuando mediante el amor estaremos defendidos del verdadero
núcleo que ha originado toda esta situación esclavizante y desigual en primer
lugar, estaremos atacando el corazón mismo de la mentira y las tinieblas, no
seremos seducidos por el egoísmo, el miedo y la traición, y siempre conoceremos
el camino correcto, porque todo lo hecho con amor está bien hecho.
10.- Conserva la F.E.
La fe es la certeza y expectativa
de las cosas que no se conocen, que son invisibles ante los sentidos. Antes que
nada, conserva la fe en ti mismo, inclusive si a veces no sabes quien eres, si
no ves resultados, si te sientes invisible o falso, siempre conserva la fe en
lo que tú eres y en lo que eres capaz de lograr, puesto que de lo que realmente
eres proviene toda tu fuerza de voluntad para lograr tus auténticos objetivos.
Luego, conserva la fe en la
naturaleza perfecta y espiritual de todas las cosas, recuerda siempre que tú no
eres la identidad física con la que representas tu voluntad en este gran
holograma, tú eres algo inmutable e infinito que usa una forma finita y
limitada para lograr mediante las experiencias acumuladas el perfeccionamiento
de tu auténtico Ser. Todo es un juego, no te identifiques con este juego
material, puesto que tú no estás en nada de lo que experimentas, tú eres la
experimentación misma, la Consciencia. Abandona la idea de que tú eres la
acumulación de tus partes materiales.
Finalmente, conserva la fe en el
éxito y la liberación final de tu alma y de la de todos tus hermanos en la
humanidad, conserva la fe en la lucha y en el triunfo, conserva la fe en los
que luchan así como nosotros conservamos la fe en ti.
Y recuerda:
F.E. =Fuerza Espiritual
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